Agustina Bessa-Luís, la inteligencia de lo inconmensurable
Agustina Bessa-Luís, de ascendencia española y portuguesa, nació en Vila Meã, Amarante, en 1922.
Publicó su primer libro, Mundo fechado (Mundo cerrado), en 1948, escribió y publicó posteriormente algunos cuentos extraordinarios, varias decenas de magníficas novelas y algunas de las más interesantes crónicas y textos sobre literatura escritos en portugués (reunidos respectivamente en A Alegria do Mundo y Contemplação carinhosa da angústia.
Esta vasta e intensa obra de Agustina Bessa-Luís supone un movimiento transformador de la literatura, que se atiene a fórmulas o modelos y que no deja de reinventar el pasado, devolviéndolo a la dispersión, que es su modo de asumir el presente. La verdad es que no existe en Agustina una tradición de la historia de la novela o de las ideas en las que su escritura se integre.
Se percibe que lo que se escribe es un diálogo con un océano sin fin de lecturas, donde lo más antiguo no desaparece bajo la exigencia “psicológica” de atención al otro en cuanto otro, que tiene como modelos autores tan diferentes como Dostoievski o Tolstoi, o el entusiasmo debido a aceptar la escritura como un acontecimiento como sucede en los grandes novelistas del siglo XX (en referencia a Virginia Woolf, Proust, Kafka y Herman Broch).